miércoles, 13 de agosto de 2025

«RE-VIVENCIAS»: PERSEVERANCIA

 



   PERSEVERANCIA (1969)

 
El don de la perseverancia es el que ilumina al ser humano
para hacerle persistir en su actitud,
aunque las circunstancias le sean adversas.
 
La perseverancia hace triunfar a la gente con fe en sí misma,
por encima de las dificultades ambientales.
 
Hay días negros, que se unen a las semanas, a los meses,
con el nexo único de la desazón, de la incertidumbre, de la angustia.
 
Solo la fuerza interior del perseverante es capaz
de superar los trances amargos de la adversidad.
 
Perseverar es estar seguro de hallarse en el camino recto,
a pesar de que la experiencia sea contradictoria.
 
La perseverancia no puede confundirse con la obstinación
que está basada en el error.
 
No se puede perseverar en la fe, ni en los principios,
sin una auténtica convicción de poseer una gran parte de razón.
 
La fe, la razón necesitan beber en la fuente de la verdad
y en el apoyo material o moral de los que nosotros apreciamos.
 
Cuando nos falta el apoyo moral, nos quedamos solos y necesitamos ser fuertes.
 
La fortaleza se fragua en la lucha diaria,
venciendo dificultades, con fatiga, con esfuerzo.
 
Muchas veces nos asalta la duda de saber si somos
inconstantes, obstinados o perseverantes.
 
Dejamos un asunto, empezamos otro y vemos
que la línea de la perseverancia no domina todos nuestros actos.
 
Cuando hay una actitud interna y externa de acomodación a la línea trazada,
vemos los frutos de la perseverancia.
 
Perseverar es ser uno mismo, hoy, mañana y pasado,
ser auténtico, constante y consciente.
 
Perseverar es obligarse a conocerse y ser consecuente.


lunes, 11 de agosto de 2025

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 




«… Paulatinamente, con el tiempo, interpretó su significado: la espada curva era una falcata ibérica, la otra, un gladius (espada romana), ambas simbolizaban dos culturas. Una prevaleció sobre la otra, pero del humus cultural ibérico se forjó, en cierta medida, el castellano. El hombre de la toga era un demiurgo que ponía fin al caos. Los símbolos de la Inquisición representaban la persecución inquisitorial que iba a padecer…» (pág. 120, Teo López Nevado, «El demiurgo»).


viernes, 8 de agosto de 2025

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 




«… Tengo esa imagen en mi dócil retina, me contengo en ella y la sostengo: alcé las manos al cielo y en un pronunciado esfuerzo doté a la lengua castellana de su más excelso reclamo unificador. Fue ese continuado diálogo y ese fiel estudio con las lenguas clásicas, los contemporáneos que nunca me traicionaron. Y ahora, ahora soy una pluma que vierte el legado de nuestra lengua madre… El latín, que me dotó audacia y convicción como un faro de eterno eco…» (pág. 118, María Calle Bajo, «Verba volant»).


miércoles, 6 de agosto de 2025

«RE-VIVENCIAS»: COMETIDO

 



            COMETIDO (1972)
 
Cometido es el encargo que recibimos para realizar algo
dentro del ámbito de nuestra actuación.
 
A veces el cometido nos lo imponemos nosotros mismos.
 
Fijar un cometido de actuación personal es concretar un programa,
poner unos medios, señalar un objetivo.
 
El cometido es algo casi imperativo,
con fuerza de obligar para nosotros mismos.
 
Hay cometidos indeclinables.
El de los padres respecto de los hijos,
el de la autoridad respecto de los subordinados y así otros.
 
Cuando se declinan los propios cometidos,
nacen los desánimos, las renuncias, las deserciones.
 
El orden supone que cada elemento humano tiene fijado su propio cometido.
 
Respetar el cometido de cada uno. Y también exigirlo.
 
Hay que educar y educarse hasta conseguir
que cada uno cumpla con su propio cometido.
 
Acometer empresas y actividades.
Esto es propio de personas íntegras, valientes, inteligentes.
 
Ser acometedor. A favor del orden y la paz.
 


lunes, 4 de agosto de 2025

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 





«… Soy grammaticus, aunque el deseo viaje hoy por pantallas y los versos ahora naveguen desorientados en una red, agónica y virtual. Yo, Aelius Antonius Nebrissensis grammaticus, reto a cualquier español contemporáneo a que me lea, me analice, me traduzca del latín a cualquier lengua autóctona. A que me viva….» (pág. 116, Anita Wonham, «Grammaticus»).


jueves, 31 de julio de 2025

ANTOLOGÍA 2024: ELIO ANTONIO O EL MITO INSOSPECHADO

 


 

ELIO ANTONIO O EL MITO INSOSPECHADO

 
El insigne Nebrija no solo fue filólogo además de gramático, lexicógrafo, catedrático, exégeta y pedagogo, sino que merodeó los sinuosos límites que separan la leyenda de otras realidades ciertas y comprobadas.
 
Así nos refirió la llegada de la barca sagrada que portaba los restos del apóstol, el que se convirtiera en germen del camino, de la concha y del báculo: Santiago, luz de estrellas, caminante perpetuo. Y así nombró también a la lupa meretriz, que se hunde y se confunde en los mismos orígenes de una Hispania ancestral, precristiana e indómita; habitada por dragones y en la que existen bocas que llevan al infierno, cuevas que son el útero de la madre olvidada, toros bravos y montañas paganas que tocan las alturas celestes de los dioses.
 
Este Elio Antonio, amante de lo mítico y evocador de épicas, también latió en estrofas que recogen el eco del legendario río de todos los olvidos: el Letes. Desde la Antigüedad, beber en este río que discurre por el Hades o ser salpicado por una de sus gotas borra toda memoria del humano pasado y anula los recuerdos.
 
Nuestro sabio erudito también fue muy capaz de rescatar a dioses como el griego Dioniso, y el dios y sus adeptos regresaron portando las pieles de los ciervos o las llamadas «nébridas», distintivo singular de este dios del vino. El éxtasis, la danza frenética y ritual y la música que llama al trance sudoroso, eso es también Nebrija. La piel del animal sirvió para ensalzar el ímpetu salvaje de los tiempos perdidos de su natal Lebrija.
 
Nebrija, que fue un hombre del mundo, que se formó en la docta Bolonia de los pórticos y que quiso acercarse a rabinos y hebreos, también atravesó la franja tenebrosa del miedo y la sospecha. Pero venció el poema, la glosa inmarcesible y la inmortalidad.
 
 
Ana María Linares Nieto
Nacida en San Fernando (Cádiz) donde reside.
Máster en Patrimonio.
Antropóloga social y cultural e investigadora.
Premios literarios: finalista este año en un certamen de poesía.
(XVIII Antología)
 
 


martes, 29 de julio de 2025

«RE-VIVENCIAS»: TIEMPO

 





  TIEMPO

(1974, Tomo III)

 

Es tiempo de meditación por muchas razones.

 

Tiempo de mirar las cosas al trasluz de la realidad.

 

Tiempo de ver que estábamos equivocados.

 

Tiempo de volver a la realidad de la vida

en toda su dificultad.

 

Tiempo de sacudir nuestra modorra conformista

y volver a conocer el porqué de nuestras dificultades.

 

Es tiempo de amar las pocas cosas auténticas

que nos da la vida.

 

Es tiempo del trabajo, de la familia, de la amistad.

 

Quedan pocas cosas.

 

Tenemos poco tiempo para enseñar a nuestros hijos

el valor de estas pocas cosas.

 

Hemos perdido el tiempo

inventando ídolos para nuestra sociedad.

 

Los ídolos son de barro

y no resisten el más mínimo impacto.

 

De nuevo a empezar y a contar el tiempo.

 

Nuestro tiempo ha terminado como la arena del reloj.

 

Hay que dar la vuelta al reloj y volver a empezar.


lunes, 28 de julio de 2025

ANTOLOGÍA 2024: FUE UN SUEÑO

 



FUE UN SUEÑO

 
Obsesionado con la figura de Nebrija, pues algo quería escribir acerca de su vida, soñé con su persona y, asombrado por estar delante de él, le pregunté con una cierta timidez:
 
—Maestro, cómo hacer cuando uno siente el impulso de renovar, ir al encuentro de algo que nunca se ha hecho, y lo que descubre es tradicionalismo y nada más, sin que se advierta ningún interés por lo que es nuevo o mejor.
—Joven amigo, cuando el mundo piensa que del paso de un cometa depende la fortuna y el destino de los reinos, y solo un hombre posee conocimiento verdadero acerca de esos astros misteriosos, entonces este solo hombre tiene la razón frente a toda la humanidad. Por tanto, el innovador que agrega a la ciencia un eslabón de oro debe esperar el asombro ajeno, pues sin querer está removiendo el lecho de las costumbres y, así finalmente, puede experimentar el regocijo de hacer en conciencia lo que tenía que ser hecho, impasible a los demás.
 —Y maestro, algo más: el lenguaje, la prosodia, la poesía y su oratoria ¿a dónde nos han de llevar?
 —La lengua es el vehículo del pensamiento y nuestro idioma castellano es el desenlace de nuestro pueblo y su historia, todo un reto, su alma. Libre sea pues la palabra, y que esa libertad sirva para gobernar el habla y los pensamientos de los hombres.
 
 
Juan Bautista Pino Pérez 
Nacido en Jerez de la Frontera (Cádiz). 
Psicólogo.
(XVIII Antología)
 
 
 

jueves, 24 de julio de 2025

ASÍ ESCRIBEN NUESTROS AUTORES

 



«… “Haced de la habilidad de la imprenta el viento que arrastre la verdad al más allá; y no cejéis en el empeño; pues se os recordará como el que llevó los latines puros y perfectos a la castellana lengua, y así seréis a la vez científico y artista; que no hay más bondad para las generaciones venideras que el forjar con la ciencia de la retórica y la gramática el arte de trasladar la sabiduría a la belleza de un texto mágico. Así lo agradecerán todos los pueblos de allende los mares; también los de aquesta orilla”...» (pág. 110, Rafael Fernández-Pintado Muñoz-Rojas, «Última carta al mañana»).


miércoles, 23 de julio de 2025

ANTOLOGÍA 2024: EL PRIMERO DE UNOS POCOS

 



EL PRIMERO DE UNOS POCOS

 
Antonio de Nebrija, grammaticus, curioso y audaz, gustoso de manjares, exagerado en sus hazañas, fue el primero de unos pocos en un tiempo de ignominia y fanatismo. Un humanista que estudió historia, astronomía, derecho, medicina, literatura... todos los saberes y, en contra de las costumbres de la época, enseñó a sus tres hijas en la lectura y la escritura. Fue un avanzando en momentos de censuras, de inquisiciones sesudas, así que se preguntó a sí mismo y después a todo el orbe: «¿Qué diablos de servidumbre es esta, o qué dominación tan injusta y tiránica, que no te permita, respetando la piedad, decir libremente lo que pienses?». Ahora cada cual es dueño de contestar a esta pregunta. Y solo un medallón con su efigie le distingue de tantos otros en su anónima fachada. Es lo único que nos queda de su porte, de su aspecto, pero atesoramos algo mucho más importante: su ejemplo, sus libros, su lucha contra la injusticia y en pos del conocimiento a cualquier precio.
 
 
Tomás Ortega 
Nacido en Burgos en 1980, reside en Sevilla.
Licenciado en Historia en Valladolid, Lisboa y Granada. 
Profesor en institutos públicos y universidades de la Martinica, Nimes, Madrid, Montreal, Łódź, Quebec y Sevilla.
Publicaciones: dos libros de poesía, Invención de laberinto (2012) y YoTúÉl (2014); un volumen de cuentos en audiolibro, Historias nómadas (2016) y el ensayo Las caras de la guerra. La guerra civil a través de los personajes de las viñetas (2018).
(XVIII Antología)